Invitado 12. Juande Ramo.

Esta invitasión requiere una esplicasión adecuá que justifique que pa el primé día de Cuarto de Finá del concurso haiga invitao a un tío tan lasio y tan poco carnavalero como el entrenadó del Madrí. No ha hecho por mi conosio barselonismo pa tratá de insuflá un poquito de mi sarnaso a ese estirao. Tampoco es que trate de continuá esa linía de asercamiento entre La Mancha y Cádi inisiá por el jurao del concurso al darle la impresionante cantidá de 98 punto a la chirigota de Herensia que vino al Falla los otros día.

El motivo de la invitasión es que ayé mi bló alcansó la inesperada e insuperable sifra de los sien mil visitante. Un día histórico que meresía una selebrasión y sobre tó un reconosimiento. Y es que Juande Ramo fue la primera vístima de mi bló, hasrá algo asín como dó año. Era un día de Andalusía que yo empesé a escribí mis pó y ese día aposté por la convivensia entre los andaluse y como ejemplo puse el partio que los palangana y los chico de Lopera jugaban esa misma tarde. Po casualmente, en ese partido de la convivensia, Juande Ramo se llevó un botellaso y dio el primé paso del camino del gafe que recorre este bló.

Por eso mismo el domingo por la mañana, cuando llegamo a las sien mil visita empesé a mové mis hilo pa localisá a Juande. Llamé a la mujé del chiclanero que juega en el Madrí que es mi contasto con la plantilla. Si alguien quiere el numbero que me lo diga y yo ya se lo paso. Totá, que entre uno y otro llegué a Juande Ramo y le invité a que se viniera esa tarde a mi casa aprovechando que había jugao el dia anterió. Como a esa hora jugaba el Barsa po el gachó prefirió vení a mi casa y ajorrarse el dijusto de volvé a vé arrasá.

El gachó llegó a su hora, saludó a mi Chari, a la Cacelin, a mi Sergio, porque es un tío mu educao. Un poco sosete, pero mu educao. Pa empesá cuando se sentó a vé la tele lo primero que hiso fue preguntá "¿Dónde está Germán? ¿Lo ha sancionado el comité de competición por acumulación de tangos? ¿Y el arlequin? ¿Lo expulsaron la última jornada?" Entonse tuvimo que esplicarle que ahora ya no lo daba Onda Cádi y Nuestra Señora porque cuando llega lo bueno lo sedemo a Canal Sú pa que lo pueda vé el mundo entero. 

Lo que pasa es que Juande de Carnavá no entiende mucho porque al gachó ná má que le procupa la disposisión tástica de las agrupasione. Por ejemplo, con el coro Los cañamaque, se quedó sorprendio de que la línea de orquesta jugara abierta a las banda pa profundisá en el sentro con la cuerda de tenore que le diera fuersa al juego de ataque, porque el coro de Kiko es un coro de mucho ataque.

De la chirigota A la big a la ban, a la big ban blú opinó que prasticaban un juego demasiao sentrao en las individualidade de los dó hombre má adelantao, con un claro cuatro sai dó, pero el juego quedaba un poquito deslabasao sobre tó en la parte del pupurrí porque los delantero no eran capase de rematá las jugada como correspondería. Escuchando lo del primé cuplé me preguntó por el tornado y cuando yo le espliqué lo que era él me dijo que le recordaba a Cristiano Ronaldo, tol mundo disiendo que viene, pero al finá no ha llegao.

Con la comparsa Los comecamino dijo que, aunque él nunca hablaba de los álbitro, en esta ocasión iba a criticarlo por no habé espulsao al jugadó que sacaron de má en el trancurso del segundo pasodoble propisiando una clara superioridá numérica por la banda del jurao y las ninfa. Yo le espliqué que la gachí no cantaba, aunque él me dijo que sí cantaba en lenguaje de sordo. La verdá que me dejó con las duda.

Con el cuarteto del Morera, Los que esperando la sentensia... se confundió. "¿Esto es un equipo de futbol sala?" "No, picha, esto es un cuarteto", le espliqué. "Pero si son cinco", respondió confundio. Entonse le tuve que esplicá aquello de que en Cádi los cuarteto son de tré, de cuatro y de sinco. Su análisi fue, má o meno, que el quinteto (es que él es mu respetuoso con el uso del idioma) tenía un buen conjuntoque reforsaba las individualidade estelare de Caleti Man y el sicópata que era como Messi, un chavá salio de la cantera pero que se había convertio en la másima estrella del momento, en el Blamblam de Oro del último año.

La chirigota de los viejo, de El niño de las monja, no le gustó tanto. Su análisi es que estaban mal preparaos físicamente y recomendó que se tomasen una papillita  espesiá que preparaba un médico que él conose en el descanso, justo ante de empesá a cantá. De toas forma disía que jugaban un poco al estilo antiguo, con fair plai de ese, sin entrá fuerte en los pasodoble y con balones largo y profundo en los cuplese.

Despué del descanso vino el coro de La jarcá de Manué. A Juande le gustó cómo el coro recuperó rápidamente la posisión despué de la presentasión, con movilidá rápida de los prasticable para reorganisarse en el sentro de la línea de tenore buscando un juego clásico con diferensiasión de la línia de tenore, segunda y bajo. Sin en cambio, al finá, el coro volvía a desajustá su posisión buscando el másimo lusimiento del entremao aunque sacrificara el conjunto de vose.

Se quedó encandilao con la comparsa de Bienvenido Los trasnochadore. Según Juande el pupurrí suponía una auténtica revolusión en el juego entrelínia con la utilisasión de nuevas posisione musicale que superan el tradisioná tré cuatro tré pa entrá en otros ámbito del juego en el contraataque.

También le gustó bastante la chirigota del Canijo de Las muchacha del congelao. Dijo que el fichaje del enano en la presentasión le había dao mejó despliegue que le permitiría arrancá algunos punto fundamentale en la clasificasión pa entrá en sona Uefa, como mínimo. Ademá, había jugao con un segundo pasodoble mu ofensivo y unos cuplese que entraban bien por banda. Lo que no le gustó fue el juego desplegao en los último minuto de la astuasión, que se había venio abajo y dejaba demasiao abierto ese flanco pa que le atacaran.

A Pedro el de los Majara sí que lo conosia aunque, pensándolo bien, quién no conose a Pedro. De la comparsa Perdimos el Norte, comentó que se notaba la esperiensia de su sentro del juego y su compenetrasión con los dó interiore que eran los que jugaban también por arriba. Sin en cambio, los cuplese fueron un momento flojo del juego que puede que les impida jugá la Champion este año.

Serraba la sesión la astuasión de la chirigota de Faly Verdugo, Con los ojito a la virulé, pero pa Juande era un poco tarde. Lo llamó el de la gomina pa preguntarle endonde estaba porque los entrenadore también tienen toque de queda como los furbolista, pero como los furbolista mienten y disen que están en su casa. Totá que se fue, porque al día siguiente tenía que estrená al negro de los risito a vé si por fin consigue sentrá un balón bien.

Cuando se fue me quedé con la sensasión de que no habíamo hablao mucho de Carnavale y que tampoco había dejao ninguna anésdota grasiosa o curiosa, pero ná má que viéndolo de lejo se sabe que es un gachó má seco que un bocadillo sardina. Pero bueno, yo tenía una deuda sentimentá con él y la saldé. Al meno que una de mis deuda quede saldá. Pero pa hoy ya tengo hablao a alguien mucho má carnavalero.