Poblema de familia

No vea la que están dando los del segundo derecha. Llevan unas semana que no se puede está en el bloque con la de grito que pegan. Un jaleo, unos numberito. Ello que siempre habían paresio de mu buena familia, gente desente de esta que no se pelea nunca. Pero que va, son una familia como toas las familia, con sus poblema y sus movida. Y pa movida las que llevan en el último mé.

Pero tó la culpa la tiene él, el Pepe, que es un picha floja. También hay que entenderlo, porque la parienta tiene trisnina. Cuando se casaron paresía tonta que una vé me la encontré yo por el descansillo tarareando la de "Hay quien dise que Cádi..." y va la gachí y me pregunta que de quién era eso. Yo le dije de "Alba, señora, de Alba" y me dise "Uy, po qué bien escribía Doña Alba, ¿tiene má cansione?"

Pero pa mi que se hasía la tonta porque la tía sabe má que los ratone colorao y tiene desesperao al mario. Se presentó a unas oposisione pa un cargo de no sé qué funsionario, pa no dá un palo al agua, vamo y no lo sacó. Desde entonse no le deja viví. Se escuchan los grito hasta en la casapuerta. Y eso no está bonito. Porque ella es mu estirá, mu pintarraquea, mu bien vestía, pero despué, a la hora de la verdá, es una ordinaria.

También es verdá que se le ha juntao tó. Porque justo despué de lo de las oposisione se han ido los dó niño mayore. Mira que se han ido pa bien, porque esa familia tiene mu bueno enchufe. En verdá, las malas lengua disen que la casa esa se la regaló el Paquito cuando vendió la finca, aunque yo no termino de creérmelo, porque yo me los quedo mirando y muchas vese le veo tol paresio a la familia de Paquito, pero otras vese me digo, "No, Carmelo. Sólo se dan un aire y si son familia son familia mu lejana". 

Totá, la cosa es que los dó niño han volao del nido. El mayó, el Negro se ha colocao poniendo poste de Telefónica en una contrata y dise que lo gana mu bien. Yo cero que él quería quedarse, pero el pare que estaba deseando largarlo hasta le surrayó las oferta de alquilere del Cambalache cuando se enteró que había encotnrao currelo. El pequeño, el Angelito, sin en cambio, no tengo ni idea de pa donde se ha ido. Yo creía que se iba a meté a cura porque él siempre ha hecho mu de lo de la religión y esas cosa. Totá, que un día se lo pregunté: "Angelito, ¿te va pal Seminario?". Y el gachó me contestó, "puede sé, pero no descartó otra posibilidá". La verdá que él siempre ha hecho mu serio y no había cojone de sacarle ná. Yo me lo encontraba por la escalera y le disía: "Angelito, ¿tus padre, cómo están?" "Bien... aunque no descarto otra posibilidá". Así con tó.

Bueno, que como se iban los niño, el Pepe ha aprovechao pa dejarle el cuarto del mayó a su sobrina la del pueblo, que tiene una cara pan que no puede con ella. Yo me creía que iba a vení una piba buenorra al vesindario, pero la gachí es una jartá de repipi y tiene el culo má feo de toa la calle Servante y de Europa entera. A la mujé no le ha gustao eso de que meta su familia en casa, que dise que no tiene los estudio y la preparasión nesesaria. Como si pa viví ahí te pidieran el graduao.

El colmo fue ayé. Había venío la cuñá del Pepe, la hermana de la mujé, que ha estao mala mucho tiempo. La tía tiene una empresa de esa de decorasión y estaba hasiendo el presupuesto. Totá, que en un momento dao yo no sé qué pasó, que la decoradora salió corriendo por la escalera, pegando grito. "Yo me niego a pintá el cuarto de rojo, el rojo ni en pintura..." Nunca mejón dicho. La gachí se fue pero no vea la que le dio la parienta al Pepe. Tremendo. Yo juraría que he visto hoy las maleta en la puerta. Pero de eso no estoy seguro del tó. Seguiré informando.