Nuevas fórmula pa consiguí una entrada

Si yo se lo dije a la Cacelin. Ten cuidao que se va a liá. Y ella, "que mi conoserr un jaque que arreglarr". Yo creía que un jaque era un moro de eso que quiere comprá el Cádi y que va a montá la chirigota con el Yuyu. Pero no, un jaque de eso es un tío que coge el interné y hase perrería. Pa que lo entendai, como Juan Carlo con la reputasión del Ramoni. Juan Carlo ha hecho el jaque de la reputasión de Ramoni. Totá que la yanqui lo tenía tó hablao y planeao cuando llegó.

- El best dei es el diesiocho.
- Buena rima- le dije yo, del tirón, y es que a mi tó me suena a chocho, diesiocho, chocolate, biscocho... ya lo sé, puede que esté má osesionao que la Esteban con Jesulín, pero es que yo no soy del ochenta por siento que está satisfecho con su vida sesuá. Coño, ochenta lleva un ocho...- Carrrmelo, lune diesiocho. Yon Carlos Arrragon y misterr Canijo, tugueder en el Falla. La best sesion de preliminare. Ai nid to ir.
- Sí, pero desde que quitaron la reventa, la cosa pa consiguí la entrada está complicá. Ante tú hablaba con el XXXXXX o con el XXXXXX (nombre suprimio pa evitá responsabilidade legale hasía el bló, que no está la cosa pa pagá abogao que ahora hay dó boca má que alimentá en mi casa) y te la consiguía, pero ahora...
- Carrrmelo, yo ya disirrrr que jaque tenerrr tó prrreparrao. Solo nesesitarrrr yurrrr jel for una cosa.
- For leidi.
- No, for Unicaja.
- ¿Unicaja? Yo en Unicaja no conosco a nadie.
- Perrro tú tenerrr mony en Unicaja.
- No, yo tengo el dinero en la Caja de Ajorro de Cádi.
- Perrro eso serrr Unicaja.
- Desde el punto de vista legá, pero pa mi siempre será la Caja de Ajorro de Cádi.

Entonse me esplicó, poco má o meno, el plan. Resulta que su jaque (aquí hay tomate) llevaba unos día tratando de entrá en la wes de Unitique, que es la wés de Unicaja que vende las entrada pal concurso. Totá, que el gachó había estao trastocando, había puesto el enlase pa las entrada, pero le derivaba al Teatro Servante, que no está en Alcalá de los Henare, sino en Málaga. Son las cosa de Unicaja, que tó lo que tienen es pa Málaga. Totá, que pa asedé le hasía falta la diresión ipé de una sucursá del Unicaja pa hasé un aseso virtuá remoto y suplantá la edisión del aforo.

- Él crrrea sólo link parrra dia 18 yo comprrrarr entrrrada y sierra el link, disiendo que serrr todo un error. El onli problem es conseguirrrr la ipé de la sucursá de Unicaja y por eso nesesitarr your jel. Yo compensarr con una entrrrada parrra verrr Jon Carlos Aragon y mister Canijo.

La oferta no se podía rechasá. Está presente en el debú de Aragón y el Canijo en el Falla era una idea mu apetesible. Que ya sé que por Onda Cádi se ve de puta madre y que el despliegue de medio, comentarista y recurso hase que sea casi como verlo en el Falla. Pero es casi. Verlo en el Falla es distinto, se palpa el ambiente. Y ademá que pa vé al Aragón vienen muchas chavalita de por ahí afuera y eso siempre es agradable porque roneando un poco de gaditanismo en el patio butaca iguá hasta pillo cacho, que a está gente le encanta Cádi y tó lo que sepa a Cádi y a mi me sabe a Cádi hasta la Bartola. Y o si no, siempre podia revende la entrada y con lo que me llevara me compraba un aifon, que eso lo que está a la moda y estoy deseando de tené uno.

Totá, que asesté la oferta. Mi misión era sensilla, a la mañana siguiente tenía que distraé a uno de Unicaja y la Cacelin haría tó lo demá.

Ayé por la mañana hasta madrugué pa llegá de los primero a Unicaja, que a las ocho ya estaba en planta. Me iba a poné en la cola del cajero, que a esa hora llegaba hasta la puerta. Me sentía como el Lute ante de robá un banco, aunque yo me iba a llevá algo mucho má valioso: una entrada pa vé a Juan Carlo. La Cacelin me hiso un gesto: "Ahí, no, a la teibol". No valía hasé cola en el cajero, tenía que ir a que me atendiera la gachí de la mesa. No había nadie en cola, que es la cosa que tienen los banco que hay uno pa atendé a dosiento y tré con la mesa libre.

- Bueno día -dije- venía a vé si me daban una hipoteca.
- No -me dijo la gachí sin que siquiera yo me sentara.
- Pero, tendrá usté que esperá que yo me esplique pa ques quiero la hipoteca, cuánto quiero, que me enseñe los tipo de interé.
- No, que no damo hipoteca a nadie y meno a usté con esa barba que tiene. Y ahora váyase que tengo que llamá mi mario pa vé con quien ha dejao a los niño esta mañana.

Salí de la sucursá con la cabesa agachá como un costalero de la Macarena. "Fracaso asoluto", le dije a la Cacelin. "Oh mai God!!! Carrrmelo, ¿como ocurrirrr pidirrr hipoteca? Lets gou otra sucurrrrsal y disirrr qu querrrer comprrrarrr asione". Con la lesión aprendia entré en la siguiente sucursá de Unicaja, que no es la mia de siempre, pero eso me daba mejón condisión y má anonimato. Del tirón me fui a una mesa: "Venía a invertí un dinerillo que tengo ajorrao comprando unas asione".

- Siéntese, por favó -me dijo la gachí nueva.- ¿Quiere algo? ¿Un café? ¿Unos pastelito?

Hay que vé cómo cambia la cosa en los banco según a lo que vaya. Pero bueno, es normá, también yo trato distinto en mi casa al que viene a robarme que al que viene a dejarme dinero. La gachí comensó a esplicá no sé qué de plaso, de rentabilidade, de estó ochion, las eléstrica y las de construsión, la inversión en telecomunicasione, las comisione (eso lo dijo mu rápido) y no sé cuánta cosa má. A mi me se estaba secando la boca de los nervio y de que no entendía ni papa. No consiguía quitá del medio a la gachí pa que astuara la Cacelin.

- El cafelito ese me vendria a mi bien ahora -le dije.
- Pero ¿va a comprá asione o no? Porque si no va a comprá asione no le traigo el café.- Que sí, que vi a comprá pero es que yo sin café no pienso, soy como Juan Valdé. Pero sin burra, que quede claro.

La gachí se levantó pa asercarse a la máquina de café y la Cacelin se lansó al ordenadó como si biera visto al Papa en la Misa del Gallo. Pero sin agresión, por supuesto. Tocó cuatro tecla, memorisó un numbero y me dijo, "vámono".

- No se vaya o le cobro el café -me gritaba la gachí detrá, pero nos escapamo ante de que le diera tiempo de pidirno la comisión cafetera.

La Cacelin le dio los numbero al jaque y al ratito ya se podía asedé a comprá las entrada del día 18. Nosotro entramo los primero y sacamo cuatro peaso de entrada en butaca que se veía del carajo. El sitio perfesto. El plan había salio tan reondo que cuando empesó a liarse la que se lió yo ya me lo imaginaba que al finá lo íbamo a perdé. Y asín fue, como ya sabei. El poblema fue que el jaque se vino arriba y le envió un mensaje a los de Carnavá de Cädi, dise que pa despistá, pero aro se enteró tol mundo y se coscaron de que era tela de raro que sólo estuvieran las entrada del lune y toas las demá no. Y eso que las del último día también valen la pena.

Al finá nos han devuelto el dinero, pero yo no quiero el dinero, yo quiero las entrada que compramo por interné pa vé a Juan Carlo. Disen ahora que lo van a sacá el 4 de enero por la mañana, pero seguro que las ponen a la venta por la mañana temprano y cuando me levanto las del día 18 ya están vendía.