Alberto

Nueve de la mañana. Suena el móvi. Yo estaba en medio de un sueño puntero en que sustituía a Subiela en la comparsa de Tino pa cantá en la finá. Totá, los dó cantamo iguá de poco, asín que ni se iba a notá. Estaba en el segundo pasodoble partiéndome el pecho en una letra contra el maltrato sicologico a los pese de pesera reonda cuando escucho el cuplé de mis macoca de Flamenkito Apaleao. Me quedo pensando en a quien le he puesto yo ese tono... Coño, eso es el Alberto. A estas hora. Qué cosa má rara.

Me arrastro por el pasillo hasta que llegó al móvi, entre lagaña le doy al botón verde y contesto con esa vó que solo tenemo los resién levantaos o los bajo de coro chundo. "Dígggggameeee" "¿Carmelo? Soy Alberto". "Po me cago en tos tus muerto". La vó del otro lao se pone a llorá. "Alberto, picha que es que yo me pierdo con una rima. Yas tá, tranquilo, no llore. Cuéntale a tu amigo Carmelo que ta pasao". "Que no me quiere. Carmelo, Mariano no me quiere. Todo ha sido por culpa de la bruja esa. La bruja mala, cabrona, hija de puta". "Ya está Alberto, que te pierde. Yo tengo una masima mu másima, en donde no me quieren no estoy. Por eso no voy nunca a casa mi suegra". "Eso voy a hacer, Carmelo, lo voy a dejar todo. Todo. Mañana mismo lo dejo todo y que se encargue Anita". "No, la Ana no. Que yo me la veo de Jilary Clinton y me se cae hasta los palo del sombrajo." "Es que no sé qué hacer Carmelo. Necesito hablar contigo de hombre a hombre. ¿Puedes venir por aquí?". "Ahora es que me coge mu mal, Alberto. Por qué no te viene tú a Cádi y hablamo tranquilote". Le dije pensando en dejá el tema pa otro día y podé siguí durmiendo. "Vale, esta tarde estoy en el Hotel Atlántico". "No, en el Alantico no que desde la última boda en la que estuve no me dejan entrá. Mejón nos vmo en el bá del gordo". "A las siete allí". "Po vale".

Alberto es que es un tío mu lansao y a mi me cae bien. Aunque tiene unas pinta de pijo que te caga, con las gafa esa que yo le he dicho un monton de vese, déjate el pelo largo y ponte lentilla, pero el gachó dise que no, que con la melena del Pepe en el Pepe ya tienen bastante. El tío me se cuela en traje chaqueta grímarengo y corbata roja como si biera salio de la sesión de informática del Corte Inglé. To la gente que se le crusaba se le quedaba mirando. Me se puso a contarme la historia. Resulta que él quería ir con Mariano en la lista pero Mariano lo ha cambiao por el de Endesa que tiene mejore enchufe y to a la culpa la ha tenio la Esperansa Aguirre que le dijo al Mariano, si va el Alberto tengo que ir yo también y aro, al Mariano tanta gente no le cabia en la lista, porque al Mariano le cabe tela, pero no tanto.

Yo le di el consejo que le doy a tol mundo, porque yo pa dá consejo soy univoco, siempre doy el mismo: tranquilisate y vente pa Cádi. "Ahora vienen unas fecha mu buena porque dentro de vente día son Carnavale, te viene toa la semana entera, te relaja, te la coge mortá y reflesiona sobre si Mariano te quiere de verdá o es solo un amó de compromiso". ¿Pa qué le dije ná? "Vale, pero es que yo no entiendo de Carnavales." Pa colmo el gordo que estaba al liquindoi de tó dijo, "po Carmelo te puede enseñá que el entiende un montón". Yo lo miré con malas idea porque no sabia si la cosa iba con segunda y porque me engargolaba al pijo ese con la de cosa que tenia que hasé yo de asqui a los Carnavale. Como Alberto tiene la agenda mu cargá, solo podía sé esa misma tarde, asín que le propuse que se viniera cormigo a mi casa y veíamo la preliminá enmientra que yo le esplicaba las mejore cosa.

Llegamo a lo justo pa vé el coro nuevo que ha sacao el Niño de la Marina con Fransi Sevilla y Tino Tová. Yo le di el primé consejo. "Enmientra cantan, no se puede hablá". El gachó sacó una libretita pa apuntá las cosa que me iba a preguntá. Si es que es pijo el hijoputa. El coro se llama La calle del arte. Yo le di las pautas prinsipale. Un coro es el grupo má fasi de distinguí porque son cuarenta cantando y unos poco sentao delante que tocan las guitarra, la bandurria y los laude. Tienen tré vose, tenore, segunda y bajo, que son los que están arriba y cantan con la boca como el león de Correo. Me se quedó mirando porque el gachó no coge bien los chiste de Cádi Cádi y él no sabe que en Correo hay unos leone que sirven de busón con una boca una jartá de grande, pero no me vi a poné a esplicarselo tó.

Lo que si tuve que esplicarle es cuando salió el coro y vio que na má que eran vente y cantaban tos en el suelo. "Es que este es un coro que trata de recuperá la esensia antigua porque los coro en la anigüeda, cuando lo escribia Batatosténe y el Tiofilo el la Tizarra eran asín a pie". Cuando le vi que me iba a preguntá algo complicao le corté el punto del tirón. Lo que acaban de cantá es la presentasión, que la cantan tos los que vienen y sirve po, como su propio nombre indica, pa presentarse. Ahora van a cantá los tango que es una cosa que na má que cantan los coro y que lleva delante una falseta de pulso y púa. A Alberto los ojo le hasian chiribita escuchando el tango y el grupo que cantó una jartá de bien.

Ahora vienen los cuplese que son dó composisione má corta y que trata de hasé reí, al finá del cuplé cantarán el estribillo que se repite siempre el mismo. De los cuplé no entendió ni jota porque eran de tema carnavalero, aunque cuando dijeron lo del dinero de las macoca si que lo cogió, porque tol mundo sabe que él es Rui Gallordón. De toas manera es como yo le dije no quiera saberlo to el primer dia, que despué te llaman empollón.

"Pa acabá viene el pupurrí que dura unos ocho minuto y en el caso de los coro suele está prescrito por los má afamao dostore pa sustituí la valeriana y otro sonnifero. No trate de entenderlo tó, que eso no puede ni uno de Cádi". De toas forma el pupurrí fue má animao de lo normá y Alberto acabó bailando al rismo del coro.

Veía yo a Alberto animao cuando le espliqué que venía una chirigota de La Linia. Pero no es el Carnavá de Cádi, preguntó. Si, pero La Línia es Cádi con más inglese, Cádi es la Línia con meno tabaco. Cuando salieron los de ¡Qué me gusta una gala! se puso a reirse. "Claro, qué me gusta una gala porque van de galos. Bien traido, bien traido". Es lo que le pasa a la gente de Toledo parriba que le hasen grasia las pamplina. La verdá que el tipo estaba bien, pero la chirigota era flojita. "¡Qué gracioso el disfraz!" "Eso sí que no, Alberto, en Cádi eso se llama tipo, no disfrá. La ropa de un agrupasión se llama tipo y la verdá que el de esta gente está mu simpatico de Asteri y toas sus casta"

"Si te ha dao cuenta en la chirigota na má que cantan dose y su ojetivo suele sé hasé reí. Son má chufla. Tienen que cantá una presentasión, dó pasodoble, dó cuplese con su estribillo y el pupurrí". "Como el coro, pero en vez de tangos cantan pasodobles, ¿no?" "Aro, aro". Desde luego, con lo inteligente que es mi Alberto y que Mariano no los quiera.

Alberto me se vino un poquito abajo con la chirigota y aparesió en pantalla una comparsa de Jeré, Las cosas del saber. "Ante de que diga ná, Jeré también es de la provinsia de Cádi y también les dejamo vení. Por sierto, la comparsa canta lo mismo que la chirigota pero con sentimiento, arte y pellisco en los huevo. Letra comprometia que provocan la crítica, la dialestica y la estética". Yo no sé que carajo dije, pero es que con el nivé de Alberto yo me tenía que vení arriba que no puedo paresé un cateto. "¿Quién es el que grita cuando canta la comparsa?" me preguntó Alberto que se le notaba supermetío en el tema. "Eso es el contralto. En la comparsa cantan los segunda, los tenore y, sobre tó, los ortavillita que son los que cantan un poquito má alto y los contralto que son los que gritan en la comparsas regulare, porque pa sé contralto hay que sé un superdotao". "¿Cómo para ser alcalde de Madrid?" "Má o meno, pero no me sea repelente Alberto que te vá a llevá toas las catea en los tablao de la viña.

En el pupurrí de la comparsa aparesió mi Chari por casa que había estao jugando al bingo y al vé a Alberto allí se puso a darle el coñaso, porque es que mi chari no está tan acostumbrá a tratá con personalidade de alto nivé como mi amigo Alberto. Yo los dejé porque no quería que me se durmiera, que si los pupurrí de coro son ladrillo, de los de comparsa mejón no hablá.

"Callarse que va a salí un cuarteto. Es un cuarteto miarmeño que se llama Un, dos, tres." "¿De Sevilla?" "Si, Alberto, sí de Sevilla que asquí viene quien quiera". "¿Y si viniera un cuarteto de Madrid?" "Aro, los del oso, el madroño y la que le cabe tela en el..." "Carmelo, cállate que don Alberto es un señó". "Me se habia olvidao que ya estaba tú asquí, Chari, choho". Alberto se jartó de reí con el cuarteto aunque se apuntó pa preguntarme quién era Juan Carlo Aragón, quién era Martine Are, quien era Quiñone, quien era Subiela, qué era el paraiso... "Alberto, picha, tiene que leé má mi bló". Lo que no se pudo apuntá fue cuando vio que salian sinco al esenario. "Pero ¿no era un cuarteto?" "Alberto, en Cádi los cuarteto pueden sé de tré, de cuatro o de sinco". Lo dejé a cuadrito. "Si te ha fijao, está gente ná má que tiene que cantá los cuplese y el estribillo, el resto lo interpreta y se llama parodia, lo que interpreta al prinsipio y tema libre lo del finá". "¡Qué gente más rara los cuarteteros!, pero son simpáticos". "Sí Alberto, sí picha, cállate la boca un ratito que viene la chirigota del Canijo".

Por la tele Germán anunsió a la Clínica Dental de Nuestra Señora de las Angustias y los Dolores de Boca. Bueno, él lo hiso como suele haserlo, sin pdonunsiá ni una sola edde. Pero que no me vi a meté yo con el fdenillo de Gedmán y su depedtodio. "¿Quién es el Canijo?" Me preguntó Alberto. "El canijo es ese hombre del medio". "¿Ese es el Canijooooo? Sois raros la gente de Cádiz". Alberto se jartó de reí con la chirigota del Canijo. "Estos son buenos, estos son buenos". No sabe ná Alberto, aro si esta gente fue primé premio del año pasao. Ademá, como el Canijo escribe letra universale, que se entienden asquí, en Ponferrada y en Calatayú po Alberto se sintió como si se le aflojara el almidón de la camisa y se relajó. "Me gusta esto del Carnaval de Cádiz yo vengo seguro, vengo seguro".

En esa estábamo cuando lo llamó por el móvil la parienta. "Me tengo que ir Carmelo, que mi queridisisisisima me reclama". "Bueno, Alberto, nos vemo en Carnavale. Me alegro de que te vaya con esa sonrisa de oreja a oreja. Dale un beso a la parienta y le den porculo al Mariano y a la Espe. Bueno, no, que a lo mejón les gusta". "Que dentadura má bonita tiene" fue lo que asertó a disí mi Chari. Entre despedida me se pasó la astuasión de Los ladrones, la comparsa de Manolo Sevilla, pero creo que los volveré a escuchá en cuarto de finá.

Ensaliendo Alberto entró mi Sergio que había visto al Canijo en casa de un amigo y que se quedó flipao al verlo en casa. Yo aproveché que me había quitao de ensima al Gallordón y que llegaba el descanso pa abrirme otra latita de melva canutera que me se está poniendo toa la cara de Rey de Oro con tanta latita, pero cualquiera levanta a mi Chari pa haserme un pá de huevo frito estando los carnavale de por medio. Pa colmo, la hijaputa toavia no ha echao a andá la cosinera que le trajeron los Reye que por lo meno le podía disí yo que me preparara una tortillita de papa. Por sierto, si le echaron los Reye una cosinera pa no hasé esfuerso, a vé si el año que viene le ponen una polvera pa que no haga esfuerso y yo me desalivie cuando me se apetesca.

Despué del descanso cantó el coro Menos humos que me cogió tomandome el yugú. Llegué pal pupurrí pero fítetú como sería el pupurrí que me levanté a lavarme los diente y creo que yo no me lavaba los diente desde que los tenía de leche. Con eso te lo digo tó.

Al coro lo siguió una chirigota que se llamaba Esta chirigota es una maravilla porque venimos de Sevilla que porque ya me había lavao los diente, que si no, me los lavo otra vé. Yo no sé alguna gente que son de Cádi cómo pueden hasé cosa tan malisimamente mala. Pero bueno, como son chavale se le perdona, aunque alguno tenían ya bastante pelito en los guevesillo.

Mi Chari se puso a fregá el plato de la melva pa no quedarse dormía y aguantá lo que venía detrá que era ni má ni meno que la comparsa de los hijo del Carapapa. De los hijo del Carapapa y del momo porque se llaman la Comparsa de Momo. A mi Chari no le gustó mucho porque ella es má de Quiñone y otros grupo que cantan má fuerte, pero a mi me encantó porque yo soy de cantá suavito y dulse. Yo lo flipaba con El Bache y las cosa de Lui Ripol. Por eso le pido desde asquí a los Carapapa que pal año que viene le den la carta de libertá al Salvi, que era el único que desentonaba en la comparsa.

Tó fue acabá el pupurrí de la comparsa y mi salón se quedó má vasío que la peluqueria de la calle Nueva a la que tan bien le cantó el Yuyu. La verdá que lo que venía no se anunsiaba como demasiao puntero, pero yo me llevé tré sorpresa. Relativa porque los grupo tenían buenos presendente. La chirigota de Córdoba Los que la llevan dentro destacó por unos pasodoble de gran calidá. También me gustó la comparsa de Sevilla Don Tormento y sus inventos que me demostraron sé una comparsa clásica de las que saben lo que se hasen. Serraron los de la chirigota de La Linia Ellos las prefieren rubias que venían de cucarachas con un tipo que les dio mucho juego y resultó mu originá.

La verdá es que estaba deseando que terminaran porque con el madrugón que me había pegao por culpa de Alberto tenía un sueño que me caía. Pero aguanté como un campeón y meresió la pena. A vé qué hago hoy que es el cumpleaño de mi Chari. Me quedan trédia bueno, hoy me convia a sená y mañana y pasao me voy pal Falla. A vé si echo a andá el deuvedé este grabadó.